Un relato exhaustivamente documentado sobre la Guerra de Canudos que reproduce prodigiosamente las mentalidades profundas, las pasiones irracionales y las desbocadas fuerzas sociales del Brasil de finales del siglo XIX.
Sinopsis:
A finales del siglo XIX, en las tierras paupérrimas del noreste del Brasil, el chispazo de las arengas del Consejero, personaje mesiánico y enigmático, prenderá la insurrección de los desheredados. En circunstancias extremas como aquellas, la consecución de la dignidad vital solo podrá venir de la exaltación religiosa -el convencimiento fanático de la elección divina de los marginados del mundo- y del quebranto radical de las reglas que rigen el mundo de los poderosos.
Así, grupos de miserables acudirán a la llamada de la revolución de Canudos, la ciudad donde se asentará esta comunidad de personajes que difícilmente desaparecerán de la imaginación del lector: el Beatito, el León de Natuba, María Quadrado… Frente a todos ellos, una trama político-militar se articula para detener con toda su fuerza el movimiento que amenaza con expandirse.
La guerra del fin del mundo, primera novela que Mario Vargas Llosa situó fuera del Perú, es un relato exhaustivamente documentado, tanto a través de lecturas como de viajes sobre el terreno en el que tuvo lugar este acontecimiento histórico. Un libro fundamental en la historia literaria del siglo XX.
Conoce a Mario Vargas Llosa:
Autor, político y ensayista peruano, Mario Vargas Llosa es considerado como uno de los grandes autores del siglo XX, fundamental para las letras españolas y miembro destacado del boom latinoamericano. Su obra ha sido reconocida a nivel mundial con galardones tan importantes como el Premio Nobel de Literatura.
Vargas Llosa cursó estudios de Derecho y Literatura en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, donde también comenzó a mostrarse muy interesado por la política. Poco después comenzó a trabajar como periodista, al mismo tiempo que seguía con su obra literaria, que ya había iniciado de muy joven, pese al rechazo de su padre. Sería a partir de 1957 que el autor peruano comienza su primera etapa literaria, publicando cuentos y relatos mientras trabaja para varios diarios como reportero.
En 1959 acudió a Madrid con una beca y en 1960 se instaló en París, ciudad clave en la biografía de Vargas Llosa. En 1963 publicó la novela que significaría su salto a la actualidad literaria, La ciudad y los perros, obra de gran calado autobiográfico y que le valió galardones tan importantes como el Premio de la Crítica Española y el Biblioteca Breve. Tras este espaldarazo, que le supuso pasar a la primera plana literaria, publicó La casa verde, libro que consiguió el aplauso unánime de la crítica.
Desde ese momento, decidió dedicarse casi por completo a la escritura, con el consiguiente aumento de su producción literaria, publicando obras tan importantes como Conversación en la catedral (1969) o Pantaleón y las visitadoras (1977). Ya en los años 80 habría que destacar una de sus novelas más conocidas, La guerra del fin del mundo, que iniciaría una nueva etapa en su estilo y que significaría su primera obra histórica.
Durante los años 80 y 90 del siglo XX, Vargas Llosa dejó a un lado su carrera literaria para abrazar de nuevo el activismo político, basado en unas posiciones abiertamente liberales, y llegando a presentarse como candidato a presidente del Perú enfrentándose a Alberto Fujimori, quien acabó ganando las elecciones. Dejando atrás este intento de entrar en política decidió instalarse en España donde le fue concedida la doble nacionalidad peruana-española.
Tras ese periplo, retomó con intensidad la literatura y de este periodo habría que destacar títulos como El pez en el agua (1993), La fiesta del chivo (2000) —que fue llevada al cine— y también Travesuras de la niña mala en 2006. Además, su pasión por el teatro ha quedado patente con uno de sus últimos libros, la versión que Vargas Llosa realiza del Decamerón en Los cuentos de la peste.
En cuanto a los premios recibidos a lo largo de su carrera, estos son muy numerosos e importantes. Además del ya mencionado Cervantes, Vargas Llosa ha recibido galardones como el Nobel, el Príncipe de Asturias de las Letras, el Planeta de 1993, incontables Honoris Causa, o el Biblioteca Breve de 1963.
Su excelente labor como colaborador periodístico quedó reconocida en 2015 con el Premio Don Quijote de Periodismo.
Más libros de Mario Vargas Llosa:
García Márquez: Historia de un deicidio
Nueva edición de una obra mítica e inencontrable cuando se cumplen cincuenta años de su primera publicación.
Publicado a comienzos de la década de los setenta y desaparecido de las librerías desde hace muchos años, este ensayo, que en su origen fue la tesis que le valió a Vargas Llosa en 1971 el título de doctor por la Universidad Complutense de Madrid, muestra la admiración del Nobel peruano por García Márquez y por su novela Cien años de soledad. En él se analiza en profundidad la obra del autor colombiano, compañero de Vargas Llosa en el boom de la literatura latinoamericana.
«Obsesiva; recurrente, una intención central abraza la obra de García Márquez, una ambición única que sus ficciones van desarrollando a saltos y retrocesos, desde perspectivas diferentes y con métodos distintos. Este denominador común hace que sus cuentos y novelas puedan leerse como fragmentos de un vasto, disperso, pero al mismo tiempo riguroso proyecto creador, dentro del cual encuentra cada uno de ellos su plena significación. Esta voluntad unificadora es la de edificar una realidad cerrada, un mundo autónomo.
Los cachorros
Cuando Mario Vargas Llosa publicó Los cachorros en 1967 era ya un escritor consagrado, en su plenitud de narrador. Relato que busca en todo momento una voz plural (según el autor obra más cantada que contada), que ondula de un personaje a otro, de lo subjetivo a lo objetivo, ha suscitado una increíble cantidad de interpretaciones: evocación de juventud, parábola sobre la impotencia de una clase social, castración del artista en el mundo subdesarrollado, y otras muchas.
Cualquiera puede ser cierta porque Los cachorros tiene la intensidad y el carácter ambiguo de las grandes obras maestras.