Hoy te voy a decir que te quiero, quitando la alarma del móvil, discretamente para que puedas dormir un poco más.
Hoy voy a decir que te quiero, cuando me siente contigo a desayunar pese a que me gustaría seguir disfrutando del calor que has dejado entre las mantas para mi.
Hoy voy a decir que te quiero, cuando te llame a medio día a ver qué tal va la mañana y voy a decir que te quiero, cuando llegues a casa y te tengas la comida en la mesa y estemos todos sentados reunidos para compartir un ratito de nuestro día.
También lo voy a decir, cuando me marche a trabajar y te quedes en casa y cuando venga y seas tú quien me tengas preparada la cena.
Hoy voy a decir que te quiero, cuando no te recuerde que es el día de los enamorados, cuando no te fuerce a comprar algo que no necesito o cuando no te obligue a tener un gesto romántico, que te sea forzado e incómodo.
Y porque te quiero ¡Cómo no te lo voy a decir hoy!